China es un país unificado con numerosas etnias. Miembro de la gran familia de la nación china, la etnia tibetana ha creado y desarrollado una espléndida cultura con rasgos propios en el curso de una larga historia caracterizada por el continuo intercambio y la interpromoción con las otras etnias, y la amalgama y la simbiosis con su cultura. La cultura de la etnia tibetana sigue mostrándose como una brillante perla engastada en la cultura no sólo china, sino mundial.
En su origen, la cultura nativa de la etnia tibetana estuvo formada por la cultura Tubo, que se extendía por el valle del río Yalong, en el curso medio de la cuenca del río Yarlung Zangbo, y la antigua cultura Shang-Shung, que floreció en la parte occidental de la meseta Qinghai-Tibet. En el siglo VII, durante el reinado de Songtsen Gampo, el budismo empezó a introducirse en el reino Tubo procedente de las planicies centrales de China,
Por motivos históricos, el Tibet se convirtió en un régimen político local de servidumbre feudal, caracterizado por la fusión de las autoridades religiosas y las políticas, y por la concentración del poder en manos de un exiguo grupo de monjes y aristócratas de altas jerarquías. El budismo tradicional tibetano ocupó durante un período bastante largo un lugar hegemónico en la cultura tibetana. Esta situación se prolongó hasta 1959, año en que comenzó la reforma democrática. Durante ese período, un reducido grupo de monjes de las altas jerarquías monopolizó los medios de producción, la cultura y la educación. Los círculos culturales y artísticos estaban al servicio exclusivo de dicho grupo y de los altos funcionarios. Los siervos y los esclavos, que constituían el 95% de la población tibetana, vivían sumidos en la extrema miseria. Ni su fundamental derecho a la subsistencia estaba garantizado, para no hablar del derecho a disfrutar de la cultura y la educación. Además de frenar el avance de las fuerzas productivas, la prolongada vigencia de esa servidumbre feudal que imbricaba lo político con lo religioso provocó el autoaislamiento y el encogimiento de la cultura tradicional tibetana en algunas de sus facetas, como la de las reliquias culturales y la de los santuarios religiosos. En esa zona no existían las correspondientes ramas modernas de las ciencias, la tecnología, la educación y la cultura.
Desde la fundación de
Durante estos últimos 40 años, de acuerdo con las estipulaciones de
Estudio, uso y desarrollo amplios de la lengua tibetana
La región autónoma del Tibet es la zona donde la etnia tibetana vive formando una comunidad compacta que representa el 95% de la población de toda la región. En el Tibet, la lengua tibetana es de uso generalizado. En conformidad con
La lengua tibetana es de uso generalizado en todos los ámbitos de la vida social del Tibet. Desde la reforma democrática de 1959, se emplean simultáneamente el tibetano y el han (chino) en las resoluciones, las leyes y los reglamentos aprobados por las asambleas populares de la región autónoma del Tibet, así como en los documentos oficiales y anuncios promulgados por los gobiernos y los departamentos gubernamentales tibetanos de los distintos niveles. En los procesos judiciales, para los litigantes de la etnia tibetana la causa se tramita en tibetano, lengua que también se usa para redactar los documentos jurídicos. En sus sellos oficiales, documentos, formularios, sobres, papeles de cartas, papeles de manuscritos y carteles, las entidades usan simultáneamente el tibetano y el han, lenguas presentes asimismo en los letreros de los organismos, las fábricas, las minas, las escuelas, las estaciones, los aeropuertos, las tiendas, los hoteles, los cines, los gimnasios, los nombres de calles, las señales de tráfico, etc.
Actualmente, la radio y la televisión de la región autónoma del Tibet emiten programas en tibetano durante más de 20 horas diarias. El Canal de Televisión por Vía Satélite de Tibet, inaugurado el 1º de octubre de 1999, transmite diariamente programas en tibetano y teleseries dobladas al tibetano. Se insiste en orientar el cine hacia las entidades de base y las zonas agrícolas y ganaderas. Asimismo, se garantiza que en toda la región se proyecten cada año 25 películas nuevas dobladas al tibetano. La publicación de libros y periódicos en esta lengua ha experimentado un rápido desarrollo. En los diez años transcurridos desde 1989, se han editado 441 tipos de libros en tibetano, muchos de los cuales han sido premiados dentro y fuera de China por su excelente calidad. Según las estadísticas, en Tibet circulan 14 revistas y 10 periódicos en tibetano. La edición en tibetano del Diario del Tibet publica diariamente un gran número de artículos recogidos y redactados en esta lengua; por otra parte, se han invertido cuantiosos fondos y se han implantado la composición y la redacción informatizadas en tibetano, poniendo así punto final a la composición con tipos de imprenta. El Periódico de ciencia y tecnología del Tibet y el Periódico de informaciones de ciencia y tecnología del Tibet, de los que también se publican ediciones en tibetano, son objeto de una excelente acogida entre los campesinos y pastores. Todos los grupos artísticos del Tibet producen programas artísticos en tibetano y los presentan en la misma lengua.
Las leyes garantizan el estudio y aprendizaje de la lengua tibetana. Los departamentos educacionales de la región autónoma del Tibet aplican en todos sus aspectos un sistema de educación bilingüe basado en el uso del tibetano como lengua curricular. Se han redactado en tibetano y se han traducido a esta lengua todos los materiales didácticos y los datos de referencia de los cursos que integran la enseñanza primaria y la secundaria del primer y segundo ciclos.
Los avances de nuestra época y el desarrollo social han traído consigo el enriquecimiento y mejora constantes de la lexicografía y la lingüística tibetanas. Los trabajos de regularización de la nomenclatura específica en tibetano y de estandarización de la tecnología informática han hecho enormes progresos. El programa codificado en tibetano ha alcanzado oficialmente no sólo el estándar estatal de China, sino el internacional, de manera que la informatización en lengua tibetana está dándose a conocer al mundo entero.
Preservación eficaz y utilización activa de reliquias históricas y libros antiguos
En el viejo Tibet, la preservación de reliquias históricas era casi una práctica inexistente. Tras la reforma democrática del Tibet, este trabajo atrajo poderosamente la atención del Gobierno Popular Central. En junio de 1959, China estableció
En 1965 el gobierno popular de la región autónoma del Tibet estableció el comité de administración de las reliquias culturales de la región autónoma, cuya principal misión consiste en gestionar la protección de las reliquias culturales de la región. Dicho comité publicó la lista de 11 entidades que gozan de la protección de nivel regional, como el monasterio de Ramoche, el monasterio de Radreng y el monasterio de Tsurpu, y restauró algunas de ellas cuya preservación exigía una acción urgente. A partir de la década de los 80, la región autónoma del Tibet promulgó una serie de leyes y de reglamentos sobre la protección de reliquias culturales:
En los trabajos arqueológicos relacionados con las reliquias históricas se han logrado éxitos notables. Las excavaciones llevadas a cabo en las ruinas de Karuo, Qamdo, han polarizado la atención de los círculos de reliquias culturales tanto de China como del extranjero. A partir de la década de los 70, los arqueólogos chinos emprendieron diversas excavaciones arqueológicas de reliquias culturales en Tibet, en las que hallaron vestigios de seres humanos del neolítico y del paleolítico, de tal manera que poco a poco se ha ido descorriendo el misterioso velo que cubría la sociedad, la historia y la cultura tradicional de la etnia tibetana. En las investigaciones generales de las reliquias históricas de toda la región, realizadas desde mediados de los años 80 hasta principios de los años 90, se descubrieron y estudiaron más de 1.700 yacimientos arqueológicos, se desenterraron y recogieron varios miles de objetos, se procedió a la sistematización inicial de los materiales formados por más de 6 millones de caracteres, más de 670 dibujos, se tomaron más de 30.000 fotos, y se calcaron más de 400 epitafios, esculturas de piedra y murales. Todos estos materiales han permitido trazar las líneas maestras de la evolución y el desarrollo del Tibet desde la antigüedad hasta nuestros días, en las que se ponen de relieve los prolongados intercambios culturales entre, por una parte, la etnia tibetana, y, por otra, la etnia han y las etnias vecinas. Todo ello ofrece a los arqueólogos del presente y del futuro una base detallada y precisa para ampliar y profundizar los trabajos arqueológicos y la protección de las reliquias culturales. Actualmente, hay en Tibet 18 entidades importantes bajo la protección de reliquias culturales de nivel estatal; 3 ciudades culturales e históricas de nivel estatal; 64 entidades bajo la protección de reliquias culturales de nivel regional; y más de 20 entidades bajo la protección de nivel distrital o municipal. En los últimos años, el Tibet ha celebrado con gran éxito exposiciones de sus reliquias históricas en Japón, Francia, Italia, Argentina y otros países. De esa manera se promueve el intercambio cultural entre la etnia tibetana y las otras etnias del mundo, y se incrementa el conocimiento del Tibet por parte de la comunidad internacional.
Los documentos y archivos del Tibet gozan de la protección adecuada. En China, la extraordinaria abundancia y la gran variedad de los documentos y archivos en tibetano siguen inmediatamente a los en han. En cumplimiento de las instrucciones del Consejo de Estado, en junio de 1959 el comité preparatorio de la región autónoma del Tibet promulgó Reglamentos sobre el Fortalecimiento de